lunes, 11 de febrero de 2008

CALLECITAS PERFUMADAS


Brillaban los adoquines bajo una moneda de plata, que colgaba graciosamente de una glicina, la cual se balanceaba perfumando mis pasos mientras cantaba de feliz nomás, porque sabía que allí te encontraría.

Y al llegar, las luces de colores adornaban el viejo almacén, que se transformaba en bar,cuando el ocaso caía.

Pasaba mis horas meditando y soñando mientras el aroma del café me abrazaba.

La blancura llego a mis sienes, te camino nuevamente y recuerdo, sintiendo aún el perfume de glicinas, regresan a mí los sueños truncos mientras la luna un poco sonrojada me guiña un ojo.

2 comentarios:

S13 dijo...

El perfume del amor es el mas bello acompañante en el camino llamado vida.
Me gusto mucho tu texto =D
Suerte!!

PD: Creo que me confundes con otra persona, o soy un poco paranoico :P

luna dijo...

Ays, no eres Patricio? jijiji, y buen S13, un gusto tenerte como visitante, gracias por atracar tu barco en esta isla.
desde mi mar, te beso.
Luna.